Inauguro un día, y también un mes, inauguro sueños y vigilia también…
Este suele ser para mí un mal mes, lejos de lo acostumbrado no elijo causas comunes, nada de sentirme mal por la falta más notoria de seres queridos en fechas señaladas, nada de decir “ya no es como antes”
Durante demasiado tiempo, todo fue igual, como ciclos repetidos. Y después, después de romper con todo, nunca ya nada fue igual. Y sin embargo en el fondo, los sentimientos son los mismos…
Así que dentro de nada, aun con estas fechas celebraré un año mas de mi existencia, un tiempo mas de compartir, un poco mas de saber dentro de mi, y un poco mas de dudas que me guiaran a seguir buscando respuestas sin cesar.
Antes de que el bullicio nos lleve, las buenas intenciones y demás parafernalia propias de los acontecimientos que vienen, yo ya quiero celebrar. Para que no se diga que son las fechas.
Y celebro, la nueva sonrisa que me acompaña, aun cuando a veces no me deja descansar.
La compañía que me deparó el destino, aun cuando a veces dude del encantamiento.
Las preguntas y respuestas que pasaron y las que llegaran.
El aprendizaje de cada día, de quien menos te puedes esperar.
El duro trabajo de ser fuerte y hacer creer que lo sabes todo, aunque a veces me quiera derrumbar.
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